HISTORIA DEL COTA

El Circuito de las Américas (COTA) en Austin, Texas, es uno de los circuitos más modernos y versátiles del mundo. Inaugurado en 2012, se ha convertido rápidamente en la sede de las principales competiciones internacionales de automovilismo, desde la Fórmula 1 y MotoGP hasta NASCAR e IndyCar, combinando el prestigio mundial con el auténtico carácter tejano.

Construyendo el circuito de clase mundial de Estados Unidos

La idea del COTA surgió en 2010, cuando el promotor Tavo Hellmund y un grupo de inversores cerraron un acuerdo para llevar de vuelta la Fórmula 1 a Estados Unidos tras cinco años de ausencia. El arquitecto alemán Hermann Tilke diseñó el trazado de 5,513 km a través de las colinas al sureste de Austin, incorporando 20 curvas y una espectacular subida de 41 metros hasta la curva 1.

La construcción comenzó más tarde ese mismo año y el circuito se inauguró oficialmente con el Gran Premio de Estados Unidos de 2012. El debut fue un gran éxito: Lewis Hamilton ganó la carrera para McLaren, mientras que los aficionados y los pilotos elogiaron el trazado fluido y las zonas de visión abiertas. Desde entonces, el Gran Premio de Austin se ha convertido en uno de los eventos más populares del calendario de Fórmula 1, atrayendo regularmente a más de 400 000 espectadores durante el fin de semana de la carrera.

Expansión a MotoGP e IndyCar

Tras el éxito de la Fórmula 1, COTA amplió rápidamente su calendario internacional. En 2013, el circuito acogió su primera prueba de MotoGP, llevando a Texas a los pilotos más rápidos del mundo para el Gran Premio de las Américas. La combinación de largas rectas y curvas técnicas del trazado resultó ideal para las modernas motos de MotoGP, y Marc Márquez se convirtió en el primer dominador del circuito con siete victorias consecutivas entre 2013 y 2019.

COTA también acogió la IndyCar Series en 2019.

NASCAR lleva el rugido de los stock cars a Texas

Un punto de inflexión importante se produjo en 2021, cuando la NASCAR llegó a COTA por primera vez. La incorporación de este circuito supuso un paso audaz en los esfuerzos de la NASCAR por introducir nuevos retos en su calendario.

La carrera inaugural fue inolvidable: las fuertes lluvias convirtieron el evento en un espectáculo caótico y Chase Elliott se alzó con la victoria en una carrera acortada. Desde entonces, COTA se ha convertido en una de las paradas favoritas de los aficionados en el calendario de la NASCAR Cup Series. El trazado técnico exige precisión, control de frenada y estrategia, una verdadera prueba para los pilotos de stock car acostumbrados a las carreras en óvalos.

Estrellas como Ross Chastain, Tyler Reddick y William Byron han conquistado desde entonces el circuito de Austin, añadiendo sus nombres a la creciente lista de ganadores del COTA. El evento también es conocido por su ambiente relajado, sus zonas abiertas para los aficionados y sus amplias áreas de visión natural, que lo convierten en uno de los fines de semana más agradables de la temporada de NASCAR.

Un recinto para todos los deportes de motor

En solo una década, COTA se ha convertido en un símbolo del alcance global del automovilismo estadounidense. Desde la precisión de la Fórmula 1 y la velocidad de MotoGP hasta la intensidad de NASCAR y la competición de monoplazas de IndyCar, el circuito reúne todas las series importantes en un solo lugar.

Más allá de las carreras, el recinto también acoge conciertos, festivales y eventos comunitarios, lo que refuerza la reputación de Austin como ciudad que celebra tanto la cultura como la competición.

Hoy en día, el Circuito de las Américas no es solo un circuito de carreras. Es un punto de encuentro para el pasado, el presente y el futuro del automovilismo, donde el rugido de los V8, el rugido de las motos de MotoGP y el estruendo de los coches de NASCAR resuenan juntos en las colinas de Texas.